martes, 26 de julio de 2011

Juguetón





A tres centímetros de ti. Nuestras narices tocándose. Nuestras frentes pegadas. Nuestros ojos buscándose y mirando la boca del otro. Unas ganas increíbles de besarnos pero queremos jugar. Yo me atrevo. Te beso. Después te alejas pero quieres más. Ahora juego yo. Te acercas, yo me alejo. Te ríes. Como me gusta esa sonrisa.
Vienes, me abrazas, me besas y yo no quiero que pares. Que se detenga el mundo, yo me quedo aquí.
Quieres volver a jugar. Acepto, pero esta vez ya no me resisto a tus encantos de niño pequeño y juguetón y caigo rendida a la presa que ejercen tus brazos sobre mi cuerpo.
Me besas el cuello y la mejilla. Me muerdes. ¿Cómo me puede gustar tanto que me muerdas?
Te busco. Mis ojos quieren verte. Estás asomado a la ventana, te giras y sonríes. Te abrazo. No sé cómo pero acabamos los dos abrazados sobre mi casi recién hecha cama. Me vuelves a besar el cuello y ríes. Hoy estabas feliz y como adoro esa cara de niño travieso.
Te pones a jugar y ves que no me gusta que no me prestes la atención que yo quiero. Me miras y yo disimulo. Apagas el juego y me abrazas. De repente estamos en medio de mi habitación besándonos. 
Me haces sentir tan bien. Tan FELIZ
Adoro cada instante que paso junto a ti. T'ESTIM!

No hay comentarios:

Publicar un comentario