martes, 9 de agosto de 2011

¡Resaca dieciseisañera!

Siempre me he preguntado cuál es la mejor forma de demostrar que alguien te importa. He pensado que puede ser un simple gesto o palabra aunque después lo analizo y veo que estos signos pueden ser falseados fácilmente.

Pienso que a todos los seres humanos que habitamos este increíble planeta: grandes, chicos, buenos, malos, altos, bajos, guapos, feos.., nos gusta, alguna vez, que se nos demuestre lo que importamos a los demás y ver lo mucho que se nos quiere.
Ver cada persona que está a tu lado y sentir que verdaderamente le importas, se preocupa por ti, te apoya, te ayuda, te anima, te seca las lágrimas, te saca una tímida sonrisa, pero no sólo están en lo malo (aunque es ahí donde se ve quienes son) también están en los mejores momentos de tu existencia recordándote por milésima vez que te quieren y están dispuestos a demostrarlo.

Esas personas (las mías, los mejores, lo mejor que tengo) decidieron demostrármelo de la mejor manera que hubiera podido imaginar. Uno de mis decenas de deseos se cumplió.
Me hicieron feliz en mi día especial. Hacía 16 años que había nacido y casi nunca me había sentido tan especial y tan querida como en ese instante en que sonó "cumpleaños feliz" de Parchís y salieron todos de sus escondrijos como niños pequeños jugando a escondite o conejitos saliendo de su madriguera.

Esas caras nerviosas al no poder más de impaciencia. Esos ojos brillantes en todos ellos. Esas risas contagiosas que no se podían despegar de nuestros labios.
Mi corazón latía rápidamente y aún más cuando vio mi vida junto a ellos enfrente de mis emocionados ojos. Mi regalo, mi precioso, dulce, emocionante y querido regalo.

Respiración cortada, palabras trabadas, pura emoción, fueron mi respuesta a sus palabras.

Fue una noche mágica en la que hice una cosa que nunca había hecho antes y estoy dispuesta a repetir. Una noche pintada no de estrellas, si no de nuestras risas tontas y contagiosas antes de irnos a dormir y un bello y cálido despertar en un paraíso; nuestra felicidad.







Para mí, esta ha sido la prueba de que ELLOS me quieren, ya lo sabía pero no creí que mereciese tanto. ¡LOS AMO!

3 comentarios:

  1. Me gusta que te sientas querida, que sientas la verdad en tu cuerpo. Te quiero

    ResponderEliminar
  2. Te queremos, porque (ya te lo dijimos) tu risa tiene un color POCO común.

    ResponderEliminar
  3. Sabes que te mereces todo esto y más. Puede ser que aquello que preparamos no fue algo muy grande, pero nuestra intención i nuestro cariño estaban presente en todo momento! Te quieroo

    ResponderEliminar